Valencia Basket se acerca a la Copa a costa del Iberostar Tenerife (98-80)

El Iberostar Tenerife cayó derrotado este sábado en su visita a un potente Valencia Basket (98-80), que no dio pie a la sorpresa. Un parcial de 16-0 en el tercer cuarto condenó las opciones de un equipo, el tinerfeño, al que no le valió el gran partido de Saúl Blanco (26 de valoración) ni la mejor actuación desde su llegada a España de Mihalis Tsairelis (13+6). La gran variedad de recursos del conjunto taronja, con hasta cinco jugadores en dobles dígitos de valoración y anotación, y su fluidez ofensiva tras el receso (30+28), decantaron la balanza a su favor.

• Estadística del encuentro

Tras resistir el asedio del equipo tinerfeño en la primera parte, el conjunto valenciano rompió el choque tras el descanso con una agobiante defensa que dejó sin espacio a su rival, le permitió correr y le dio confianza para pulir sus ataques estáticos.

En el arranque, el talento del escurridizo Richotti y la buena labor de sus interiores cargando el rebote ofensivo permitió al Iberostar Tenerife seguir el ritmo de un ordenado Valencia Basket, que con dos bases en la pista siempre supo dónde llevar el balón (22-17, m.10)

El equipo canario, con Jaime Heras supliendo con solvencia al lesionado San Miguel, supo escapar de la pegajosa defensa de los locales con buenos cortes hacia la canasta de sus jugadores sin balón que minaron la moral de los jugadores de Valencia. Fue el atrevido Tsairelisel que más daño hizo y el que mantuvo a los locales en el partido (35-30, m. 17).

La clarividencia de Pau Ribas dio tranquilidad al Valencia, pero la agresividad defensiva del Iberostar Tenerife fue de menos a más y la falta de acierto de Dubljevic lastró a los locales que, aunque mantuvieron el control del choque, se fueron al descanso con una exigua renta (40-37, m. 20).

Tras el descanso, Velimir Perasovic juntó en la pista a Guillem Vives y a Ribas y el Valencia despegó. Con mayor presión sobre el balón, pudo correr y ganar confianza para sus ataques estáticos y, con Harangody certero en el tiro, firmó un parcial de 16-2 que le permitió abrir brecha en el marcador (56-39, m. 24).

Viendo que se le escapaba el partido, el Iberostar Tenerife se desubicó. Dos técnicas, una por protestar a su entrenador y otra por simular a Sikma, parecieron rematar al conjunto de Alejandro Martínez.

Pero el orgullo de Saúl Blanco y un par de contraataques evitaron que los visitantes se quedaran sin ninguna opción antes del último cuarto (70-57, m. 30) y tras superar ese mal momento se agarraron al partido con un par de triples de Levi Rost sin importarle demasiado que su desventaja siguiera por encima de los diez puntos.

Viendo que el Iberostar Tenerife no se desenganchaba del encuentro, Perasovic recuperó a la dupla Vives-Ribas para evitar sobresaltos. Lo logró, en parte también porque Lucic y Loncar mantuvieron el listón físico y dejaron sin opción de remontada a los visitantes.